"EL HEAVY METAL ES EL VERDADERO MOVIMIENTO DEL ROCK"
Tres
tópicos casi excluyentes dominaron la charla que mantuvimos en la sala de
ensayo de Hermética con Ricardo Iorio, el Tano Romano y un circunspecto Claudio
Strunz: el flamante álbum "Víctimas del Vaciamiento", los actuales
cauces de la lírica del grupo, y la inminente apertura del monsters of rock
local.
-
Quedaron conformes con el disco?
R.I.:
Sí, nosotros quedamos conformes con todos los discos que hicimos. Al menos yo,
en mi carrera, quedé conforme, cuando se terminan, con todos los discos que
hice. Pero hay veces que tenés mas posibilidad de quedar conforme con respecto
a dejar tu obra en un mecanismo de estos. Con "Acido Argentino" estábamos
muy conformes tomando en cuenta lo limitado de la producción. Gracias al éxito
de "Acido Argentino" hubo más producción como para poder elaborar
una pre-producción. Yo por mi parte estoy muy satisfecho con el sonido que se
logró. Pienso que de otra manera no podía haber sido. El disco suena bien y
confirmó que antes no pudo sonar mejor porque no había producción. Nuestra
idea más inmediata había sido regrabar el primer trabajo de Hermética con
Pato (Strunz) porque nosotros mismos somos conscientes de la potencia que esos
temas pueden adquirir al tocarlos en vivo o en una placa. Pero el sello no está
de acuerdo, no quieren hacerlo.
-
Vos, las letras de este disco, las escribiste de la misma manera que las del
primero?
R.I.:
Sí, por
intuición. Y siempre a que me conformen, claro. Uno trata de perfeccionar lo más
que puede lo que tiene, o sea que no se repitan las mismas palabras en una
estrofa, o que el significado en si quede lo más parecido posible a los oídos
de la persona a la cual uno le interesa que el tema llegue. Entonces se corrige
hasta el mismo día que se va a grabar después
de haber cantado el tema un año, "no, pará que primero vamos a
cambiar esto", salen esas cosas. Este disco salió mas pesado que los
anteriores, no tan speed. Es lo que salió, nosotros no nos planteamos hacer un
disco de esta manera o de otra.
-
En "Victimas del Vaciamiento" parece haber un análisis más esquemático
de la realidad. Le dedicás un tema a los hispitales, otro a los políticos
corruptos, otro... En el primero se entretejía mucho más....
R.I.:
Sí. Es que
no alcanza un CD para poner toda la obra de uno. Pienso que es por eso, por ahí
en el primero estaba la urgencia de plasmar todo junto. Aparte se va
complicando cada vez más, porque te alcanza el miedo a repetirte. A nadie le
gusta que le digan "ah, sí, esto ya lo dijo en otro lado".
- Yo me acuerdo mal o
"Moraleja" había sido compuesta al principio como una joda?
R.I.:
Joda, no. Ese tema nosotros lo tocábamos cuando estábamos mamados. De ahí
salio la canción, la música, payándola por ahí en algún fogón, durante las
giras. Luego Alvaro le puso ese piano y nos pareció que quedaba una cosa tipo
humno de escuela o maestro de música de escuela, nos pareció bien y lo
pusimos.
-
Tano, por qué decidieron incluir ese instrumental tuyo tan climático y
diferente al anterior?
A.R.:
Porqué me puse a jugar con unos efectos que había comprado, me copé y, como
acá en Hermética no se censura nada... Si yo digo "loco, tengo esto, lo
quiero poner", va. Acá no hay que preguntarle a nadie lo que va o no va.
-Cómo
están viviendo la proximidad del Monsters Of Rock? es algo así como una
presentación clave para Hermética?
R.I.:
No, para
nada. Nuestra principal idea es que los Black Sabbath, los Slayer o los Kiss
sepan que hay una banda acá donde alguno puede llegar a empuñar una bandera o
a cantar su nombre. Ahora, nosotros no tenemos siquiera intención de ganar ahí
mas público, o de creernos que vamos a ganarnos el escenario y correr y hacer
cosas que no son nuestras; como saltar un retorno y quebrarnos una pierna.
-
Sin embargo, no piensan que la gente tiene un poco la idea de "Por fin Hermética,
se lo merecian!!"?
R.I.:
Bueno, eso lo puede pensar quien quiera. Nosotros consideramos que estamos ahí
no porque lo merecíamos, sino porque es de merecerse el producto que puede
obtener el que organiza. Nada más. Hermética iba a seguir siendo Hermética,
aunque fuese otro el que abriera el evento. Los pasos con respecto a las bandas
extranjeras los dimos ya con Motörhead y con Black Sabbath. Porque aunque venga
una banda acá y meta 17.000 millones de personas, no es la nuestra tocar con
A-ha o con INXS, o con quien venga. Gracias a dios pudimos estar con quien
quisimos estar.
A.R.:
Yo pienso que si algunos de los pibes que nos vienen a ver a nosotros, ya que
Hermética no puede hacer un River por sí misma, y quieren ver cómo es Hermética
tocando en River, bueno, se lo dedicamos a esos pibes que nos siguen a todos
esos lados donde van doscientas o quinientas personas, o en Capital, donde van
cinco mil.
-
No te parece que por ahí en esta época el heavy metal según lo practica Hermética
está un poco a contramano de lo que pasa en el mundo?
R.I.:
Porque tal vez ya sea considerado un clásico. Además, pienso que Hermética
parece o está de contramano con respecto a lo que tiene difusión. Si vos te
ponés a mirar MTV, todos los grupos metákicos que aparecen tienen una onda
rap/Mano Negra. Nuestra intención tampoco es mudarnos a lo que salió, porque
si no va a pasar como con el twist. El heavy es heavy, y hoy el heavy se
reivindica porque hace diez años nadie apostaba por el heavy.
A.R.:
Yo creo que los integrantes de Hermética nunca se preocuparon por ir de la
misma mano que los demás, sino por tocar lo que sentían.
R.I.:
La intención nuestra también es documentar el presente inmediato de nuestra
nación para lograr la comunicación. Poder ir nosotros a Colombia, a Mexico, a
Venezuela, a que otros heavys nos escuchen y lograr la comunicación, que es
darse cuenta ellos por medio de nuestra música cuáñ es el presente inmediato
de nuestra nación, y ahí se van a dar cuenta de que en la Argentina los pobres
son los que escuchan heavy metal, a diferencia de los demás paises latinos.
Porque vos tenés a Alfredo, que presenta el headBangers, y así son los heavys
en México, no son changuitos como acá; allá los changuitos están lustrandole
los zapatos al turista, o laburando, o escuchando para escaparse sus cumbias o
sus músicas tradicionales y tomando vino. Pienso que lo más agraciado que uno
puede tener es el ser profeta en su tierra, y que en tu mismo país ese
movimiento reconozca que estás formando parte de su historia. De nada me serviría
a mi ser un boom en México y no poder tocar acá ni en una pizzería. Otra es
que nosotros no tenemos la intención de ser como Sepultura; es más nos da lástima.
Para nada queremos ser ese modelo, títeres de una empresa que... sí, tocan en
cualquier parte del mundo pero en su propio país mucha gente los va a ver
porque tocaron afuera y tuvieron exito allá. Por eso no quisimos firmar
contrato con multinacionales, ni ayer ni ahora. No consideramos que tocar en
otros lugares sea lo más importante para nosotros; somos así. Con respecto a
aquellos lugares donde tendríamos que cambiar nuestro idioma o donde no se
entendería nuestra música, sobre todo.
-
Ustedes vienen recien del Interior y llevan muchos montones de shows...
R.I.:
En la
historia del rock nacional los intérpretes que más se desparramaron por
nuestra tierra fueron León Gieco y Hermética. Por estadistica, Eh!...
-
Y el interior los sigue impactando como las primeras veces?
R.I.:
Sí, sí, Nosotros hicimos Neuquén, Comodoro, Trelew... y llegamos a Neuquén a
las siete de la tarde, se nos había roto el micro y llegamos en un camión,
bajamos, armamos, tocamos... Fueron 1800 personas y todo lo recaudado tuvimos
que dárselo al juez de Neuquén, oficial de justicia, porque fue tal el
destrozo que la policía pensaba que era a nosotros a quienes iban a matar, y
con nosotros no era la onda, y tampoco ellos (los fans de allá), ignorantes,
por no tener una continuidad musical, ya que esos espectáculos no se hacen
todos los días... bueno fue tan terrible que si yo te muestro el video, vos me
decis "dale, hijo de puta, esto lo rompieron ustedes!", y con un
martillito hasta la cosa más ínfima. Después de todo ese problema nos fuimos
a Comodoro Rivadavia, veinticuatro horas arriba de un micro, dieciocho pibes,
con todo el trajín de la vida de los artistas y de un grupo como Hermética,
que parás en cualquier lado cuando la cerveza se terminó. Y llegamos allá y
el chofer dice "Cómo! Ya hay mogólicos?!. Claro, porque el tipo estaba
impactado por la cantidad de gente que había a las cinco de la tarde, el
concierto estaba anunciado a las doce de la noche y ya había doscientos
pibes!!. Inclusive la gente de la ciudad se preguntaba qué pasaba, porque veían
doscientos pibes vestidos medio igual y con el pelo largo. Nosotros sólo
podemos hablar de nuestro entorno, de los avatares de una banda de rock, y a
veces se excede lo que uno imagina, porque nosotros viajamos veinticuatro horas
a Comodoro Rivadavia en un micro y decimos "bueno, irán cuatrocientos
muchachos", y claro, llegás y ves doscientos, y cuando salís a escena ves
que hay más de mil, y es Comodoro Rivadavia y hace veinte grados bajo cero y
hay un viento de cuatrocientos kilometros por hora...
Es impactante, es chocante, no?, saber lo
que uno no imagina que es capaz de estar transmitiendo a otro. Por eso es que yo
también trato de cuidar las expresiones, de que lleguen como yo las tengo en la
mente.
-
Hablando de las expresiones, qué tanto aportó tu infancia y el entorno de tus
viejos a la lírica que creás hoy?
R.I.:
Con respecto a lo musical mis viejos no me alentaban porque pensaban que yo tenía
que aportar para la casa trabajando. Pienso que no hay peor cosa que trabajar
para la familia porque de última siempre es poco y que tu edad es poca. No había
un incentivo, además el aspecto no les copaba, siempre había un reniego por
eso. Y siempre imaginaron un mal futuro, es decir, te vas a casar con una drogadícta,
vas a vivir en una villa y tus hijos van a estar en un orfanato, esa historia,
no? A diferencia de ahora que inclusive hay padres que le hacen estudiar al hijo
un instrumento a ver si sale un Maradona de la guitarra. Por entonces era duro,
y pienso que gracias a toda esa prueba de vivirla duro es que mi grupo es Hermética,
y pienso que si Calamaro hace una música diferente a mí es porque fue
diferente su entorno y que cada encarnación trata de llegar a quienes se le
parecen.
-
Había música en tu casa cuando eras chico?
R.I.:
Sí, tangos. Tangos que recién ahora rescato. Yo siempre le di mucha
importancia a lo descriptivo del tango. Porque yo escuchaba tangos de los años
cuarenta en los años sesenta, y me describían cómo eran los cuarenta; en
discos de Corsini, por ejemplo. Eso es lo que en estos momentos me interesa,
pienso que las cosas descriptivas son las que quedan, porque los sentimientos y
las expresiones pasionales son siempre las mismas en la Historia de la
Humanidad. Podemos tener un montón de escapismos en esta gran red de consumo
que hay, pero los problemas familiares, matrimoniales, de padres a hijos y
sociales son siempre los mismos desde que la sociedad está implantada en el
planeta, no hay cambio en eso.
-
Pero por ejemplo, cuando decís "Cervezas en la esquina del barrio varón..."
ahí hay un localismo muy notorio.
R.I.:
Sí, ese
localismo viene porque pienso que, de todas las expresiones, el heavy metal es
la que más puede ligar con el lunfardo. Es más, pienso que es el verdadero
movimiento del rock, porque los que eran rock hasta hace diez años, ya no lo
son. Sí es verdad, yo enfatizo esas descripciones para que el que compre un CD
de Hermética dentro de veinte años su hijo de quince años, hurgando en sus
cosas escuche como yo escuché esos tangos de Corsini o de algún otro autor, y
sea reflejado en la persona del momento pasado, cuando su padre tenia tal edad
Reportaje: César
Fuentes Rodriguez